Un recurso que me gusta tocar ultimamente en los chistes es el de la calavera que habla. Parece un tema limitado, pero en realidad no hay más que dibujar una calavera y esperar a que te diga algo, y siempre tienen algo que decir porque ellas nos conocen mejor que nadie.
Estas son tres que aparecieron en el blog compartido, pero habrán más, porque, por ahí, hay varias esperando su turno.
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